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sábado, 23 de abril de 2011

puros reproches


En la cúpula del Pit-Cnt genera preocupación que sindicatos de empresas desacaten los convenios salariales luego que el gremio de la rama de actividad lo acordó con el empresariado. La actitud no respeta lo escrito en la ley de Negociación Colectiva vigente y desoye además premisas históricas del Pit-Cnt.
Los dirigentes de experiencia recuerdan siempre una frase del desaparecido José D´Elía: los acuerdos se hicieron para respetarse.

El dicho se convirtió en una premisa histórica para el Pit-Cnt. Sin embargo, ahora preocupa que sindicatos de empresa desacaten los acuerdos salariales, desobedeciendo incluso al sindicato de rama, encargado de la negociación y el acuerdo con las cámaras empresariales.

La ley de Negociación Colectiva para el sector privado legitima en la negociación salarial al sindicato de la rama de actividad por ser la organización más representativa de los trabajadores. La normativa aprobada fue aprobada con la resistencia de las cámaras empresariales y también tuvo su momento de discusión a nivel parlamentario.

El Pit-Cnt defendió la ley ya que a través de ella se aseguraba la negociación salarial por rama de actividad primero y el cumplimiento de lo acordado después. Desde la central sindical se fustigaba en el pasado a las cámaras empresariales, culpándolas de no negociar y de incumplir también después lo acordado con los trabajadores.

Y de allí se recordaba el dicho de D´Elía sobre el cumplimiento de lo acordado. Pero ahora los que están en falta no son los empresarios, sino algunos sindicatos de empresas que desobedecen al sindicato de rama.

Las diferencias metodológicas entre los sindicatos de Ta-Ta y El Dorado con la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicios (Fuecys) tras el acuerdo tripartito en el subgrupo de supermercados derivó en instancias judiciales.

Desde el Pit-Cnt no se consideran ambos conflictos -cuya naturaleza sindical llegó a ser criticada por los gremialistas- como situaciones aisladas, sino como una realidad que se repite en otros sindicatos como ocurrió en los molinos arroceros.

La decisión de ocupaciones por parte de sindicatos de base fue vista por dirigentes como una metodología peligrosa, que puede ser aprovechada por los empresarios con vistas a negociar directamente con el comité de empresa.

El dirigente del Secretariado Ejecutivo, Fernando Pereira, precisó a Ultimas Noticias que cada vez más se ratifica en el movimiento sindical la importancia de negociar por rama, por federación, ante las representaciones empresariales.

“Defendemos que la mejor negociación es la que se hace por rama. Es más, debería tenderse a la reducción del número de federaciones para hacerlas más fuertes. Así, se benefician los sindicatos más chicos de la movilización de los más grandes”, acotó.

La dirigencia de Fuecys reprochó antes de Semana de Turismo a los trabajadores de Ta-Ta y El Dorado que desconocieron un acuerdo, aprobado por 15 votos contra 42 en una asamblea nacional de delegados, cuando ocuparon los locales comerciales.

La federación tomó distancia de las ocupaciones del sindicato de Ta-Ta, pero además advirtió que la medida puso en riesgo un acuerdo considerado importante por los sindicalistas de Fuecys, el cual beneficia a 17.000 trabajadores.

La atomización a la hora de negociar fue señalada como un problema en otros gremios. El dirigente de Fuecys Raúl Ferrando recordó que la negociación de los trabajadores de supergás se complicó porque se negocia por separado el envasado, flete y distribución.

Ferrando indicó a Ultimas Noticias que al terminar la negociación de los trabajadores del envasado debieron tomarse medidas por los fleteros, responsabilizando a los empresarios por haber instado a llevar adelante conversaciones en tres mesas diferentes. Según adelantó Ferrando, la voluntad de Fuecys es reclamar la negociación única para todo el gas licuado, evitando así la experiencia chilena en la cual se determina que cada cincuenta trabajadores haya un sindicato, generando varios en una empresa grande.

Pereira evocó que entre las “reglas de oro” del sindicalismo figura la frase de D´Elía y aseguró que “la decisión es de la mayoría y todos acatan”.

Aunque el dirigente de Fuecys Héctor Castellano aceptó que hay otros factores en juego -“en parte en Ta-Ta”-, como la acción de corrientes político-gremiales afines a Asamblea Popular y el Partido de los Trabajadores, lo considera una cuestión secundaria.

También Pereira encontró poco trascendente reducir la problemática a un simple “enfrentamiento entre corrientes”, señalando que se trata de una realidad que va de la mano con el crecimiento de afiliados que están teniendo los gremios.

“No pasa en todos los gremios. Hay sindicatos que tuvieron a lo largo de la historia un nivel de adhesión elevado, incluso por encima del 80% de trabajadores de la actividad creciendo ahora otro 10%, que es una cifra muy alta en todo el mundo”, añadió.

“El problema lo tenemos en los sindicatos donde el crecimiento llegó a cifras del 500%. Los dirigentes sindicales no son plantas que se riegan y crecen. Llegar a ser un dirigente requiere fogueo y, tiempo”, dijo.

ATRIBUYEN DIFERENCIAS A INEXPERIENCIA

El delegado de Fuecys Héctor Castellano manifestó a Ultimas Noticias que en las nuevas generaciones hay sindicalistas con una actuación despegada de la experiencia de los dirigentes con más años.

Castellano consideró que no se trata de cuestionar a los nuevos dirigentes porque tomen una metodología radical, sino de indicarles que el movimiento sindical entiende las luchas como procesos a desarrollar y no como actos aislados.

“Muchos nuevos compañeros tienen la experiencia de 2005 para acá. Toman como natural varias leyes que reconocen derechos de los trabajadores o que haya una ley de negociación colectiva; no las ven como conquistas importantes”, agregó.

El dirigente de la Federación Ismael Fuentes expresó que hay “una nueva sindicalización con sectores muy nuevos e inexpertos desde el punto de vista de la organización y que no entendieron todavía cuál es el juego de la democracia”.

“Primó la ansiedad de algunos trabajadores, la juventud, la inexperiencia, la inmadurez y eso hizo que hubiera respuestas mientras el convenio se estaba firmando”, agregó.

Según aclaró a Ultimas Noticias la secretaria de organización de los Jóvenes del Pit-Cnt, Jennifer Read, “la formación como gremialista de cada joven la hace dentro de su sindicato”. No obstante, señaló que hay “una instancia formal, que son cursos de economía política, negociación colectiva y otros temas que se dan por parte del Instituto Cuesta-Duarte”. A su vez, Castellano destacó la importancia del Instituto Cuesta-Duarte para la formación, pero reconoció que puede haber dificultades en la transmisión de la experiencia a los nuevos sindicalistas.

“Cada sindicalista cuenta con la experiencia de otros dirigentes, pero hace su propia experiencia; me parece bien. También es cierto que el movimiento sindical puede indicar que la experiencia enseñó que no somos bomberos ni incendiarios”.

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