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viernes, 2 de septiembre de 2011
inocencia robada
La madre de Candela Rodriguez dijo este viernes que a su hija la mataron "porque se asustaron", y se mostró molesta por las versiones de prensa que señalan que se investiga a gente de su entorno. "Es todo un invento que se investiga", señaló, y apuntó que "van a aparecer" los que la mataron.
La madre de Candela Rodríguez, la niña de 11 años asesinada en un caso que conmociona a Argentina, dijo que quienes raptaron a su hija la mataron porque "se asustaron" al sentirse cercados.
En su primer contacto con la prensa tras la aparición del cadáver de la pequeña, Carola Labrador aseguró, desde la puerta de su casa en la localidad bonaerense de Hurlingham, que no va "a parar hasta que aparezca el verdadero culpable" del crimen.
"Se asustaron porque no pensaron que yo iba a hacer tanto. Ahora van a aparecer los que mataron a mi hija. Se asustaron porque estaban rodeados", afirmó la mujer.
Notablemente ofuscada con la prensa, que informó que la Justicia y la policía investiga posibles nexos del entorno familiar de la niña con delincuentes, Labrador aseguró que "es todo un invento que se investiga" a su familia.
"No sé quienes son. Si yo hubiera sabido, hubiera sido la primera en ir a buscarlos. (...) No puedo aportar ninguna información porque no sé nada", dijo tajante.
Según la prensa local, los investigadores del caso analizan posibles nexos del padre de Candela, preso por robo de vehículos de transporte, con bandas delictivas, y también a la tía de la menor y a la ex pareja de la madre de la niña.
Candela fue raptada el pasado 22 de agosto a pocos metros de su casa y su cuerpo fue encontrado este miércoles, desnudo y dentro de una bolsa, en un basurero a pocos kilómetros de allí, en una zona muy transitada y que formaba parte del área donde la Policía había desplegado la búsqueda.
La Policía difundió llamados recibidos por la familia de la víctima con amenazas de que no le verían más si no devolvían dinero.
El contenido del mensaje hizo a la policía volver a investigar al padre de la niña, Alfredo Rodríguez, quien este jueves prestó nuevamente declaración judicial.
Federico Nieva Woodgate, fiscal general de la localidad bonaerense de Morón, jurisdicción judicial de la que depende Hurlingham, aseguró hoy que "por el momento no hay elementos firmes que permitan imputarle algo a alguien".
Según Nieva Woodgate, el padre de la niña "habló de grupos, señaló cuáles eran y habló de que en el barrio lo trataban de buchón de la Policía Federal".
En tanto, un hombre fue detenido en la sureña ciudad de Río Grande y se investiga si tiene vinculación con el secuestro y la muerte de Candela, según fuentes policiales citadas por la agencia oficial Télam.
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