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El presidente estadounidense, Barack Obama, criticó la noche del lunes a sus opositores republicanos ante donantes del partido demócrata, al señalar que aquellos se negaron a cooperar con él en el Congreso a pesar de la gravedad de la crisis económica.

Al asumir el cargo en 2009, Obama esperaba que sus compatriotas podrían "ser solidarios como estadounidenses" para atravesar la crisis, aseguró durante una cena en un apartamento situado en Park Avenue, una de las calles más lujosas de Nueva York.
Sin embargo, "no hemos tenido un socio dispuesto", se quejó el presidente frente a unos 60 invitados que habían pagado unos 35.800 dólares para ayudar a financiar la campaña electoral del Partido Demócrata para las elecciones de noviembre de 2012, en las que Obama buscará un segundo mandato de cuatro años.
Al referirise a las relaciones con los republicanos, que consiguieron la mayoría en la Cámara de Representantes en enero, reduciendo así su margen de maniobra, Obama señaló que "algunos desacuerdos son imposibles de reconciliar".
La reunión fue organizada en la casa de un banquero de inversión.
El presidente Obama se encuentra en Nueva York hasta el miércoles por la noche para participar en la Asamblea General de Naciones Unidas y encontrarse con varios líderes extranjeros.
(AFP)