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Zaira Nara relató el momento exacto en que Diego Forlán le propuso casamiento y ella comenzó a llorar. "Pero... ¿querés o no querés?", repreguntó el uruguayo. Gracias a Forlán, ella rompió sus esquemas: "siempre decía que nunca iba a dormir con alguien que no fuera mi marido". Zaira Nara pertenece a los "mediáticos". Por eso algo tan privado y personal como una propuesta matrimonial puede y debe ser contado en detalle para lograr la portada de una revista de espectáculos.

En esta oportunidad fue Gente quien la entrevistó. Ella relató cómo ingresó al lobby del hotel Eurostars Madrid Towers del brazo de su novio cuando el recepcionista la sorprendió con un ramo de rosas rojas. "Eran como las que llegan a los programas de las divas, las más grandes que recibí en mi vida".

"Sabía que algo raro pasaba", agregó, cuando Diego Forlán se negó a cenar con unos amigos de ella. "Die, los chicos se van mañana", dijo ella, y respondió: "no, bebé. Reservé una cena en un hotel para los dos. Dejá a Morena con alguna amiga, porque hoy no volvemos a casa".

En las primeras horas de la madrugada del domingo 6, ella miraba por la ventana de la habitación, y al darse vuelta encontró al futbolista de rodillas. "¿Te querés casar conmigo?", le preguntó y ella solamente se puso a llorar. "Pero... ¿querés o no querés?". "Sí, obvio que quiero".

Durante la nota contó que Forlán le rompió el molde. "Yo siempre decía que nunca iba a dormir con alguien que no fuera mi marido", agregando que "la distancia y Diego provocaron que rompiera todos los esquemas".

Sobre la distancia que los separaba confesó que "tratábamos de fingir que teníamos una relación normal. Cuando él venía a Buenos Aires hacíamos todo a las corridas. Ahora que me instalé en Madrid estamos relajados, sin apuros".

"Si él quiere jugar al golf, va tranquilo; y si yo me quiero ir a tomar mate con mi concuñada toda la tarde, también. Ya no hay que resignar: nos vamos a dormir juntos todos los días".

Con respecto a la propuesta, "yo estaba recontra decidida, sin que me lo pidiera. Sabíamos que era el momento justo. Si me lo proponía hace dos años no lo aceptaba, porque recién empezábamos. Los dos hicimos un gran esfuerzo para que creciera esta relación a la distancia. Sufrimos, pero la llevamos de la mejor manera posible".

A diferencia de su hermana Wanda, ella quiere una fiesta íntima. "La idea es hacer algo lindo. No me interesa tener la fiesta más glamorosa, ni derrochar. Lo único que quiero es que se cumplan todos los sueños que tenemos los dos".

"Todavía no sabemos si va a ser a mitad de año, después de la Copa América, o en el verano. Supongo que será en Uruguay, pero todavía no lo definimos".

Respecto a su futura carrera, "hoy ya no podría aceptar un programa de lunes a viernes, porque mi día a día es con él. Pero desfiles, conducciones, sí voy a poder agarrar, porque él también viaja mucho entre semana, así que va a ser fácil de coordinar. Por ahí cuando tengamos hijos se complique...".