ADIÓS CILINDRO

Las inmediaciones del Cilindro están cercadas. Desde 50 metros se observa como el sol cae a pleno sobre los escombros que tapan lo que fue la cancha. No queda techo. En la estructura se aprecian grietas enormes. “Parece que lo hubieran bombardeado”, grafica el secretario general de la Intendencia de Montevideo Ricardo Prato. Imágenes del día en el que el Cilindro pasó a ser historia.

Publicado el: 21 de octubre de 2010 a las 13:53
Por: Diego Muñoz
Es raro llegar al Cilindro y verlo así. De lejos, casi en ruinas. Con carros de Bomberos a su alrededor. Con señores de casco, saco y corbata adentro de lo que queda de la cancha. Justo ahí, donde jugaron tantos grandes de pantalones cortos y championes altos que se disfrutaron desde las tribunas. Justo en ese lugar, donde hoy comenzaba el lustrado del piso flotante para que se volviera a jugar al básquetbol.

Porque más allá de otras actividades, el Cilindro fue una cancha de básquetbol.

El terreno está cercado con una cinta amarilla pero desde lejos se ven las enormes grietas entre las puertas cinco y seis. Son apreciables aún desde 50 metros.

Los policías le piden a la gente que no avance. Explican que “hay peligro de derrumbe”. Los vecinos son entrevistados por algunos periodistas. Dicen que escucharon explosiones, que el polvo inundó la zona y otras cosas. Incluso hasta se animan a dar hipótesis de cómo se inició el fuego.

Por la puerta abierta se observa como las autoridades y los bomberos recorren lo que fue la cancha. Impacta ver como caminan debajo del sol y por encima de los escombros.

La estructura cilíndrica se mantiene, aún agrietada, pero el techo se vino abajo. Esa estructura colgante de 7.000 metros cuadrados y sostenida por tensores cedió por algún motivo. Ahora intentan determinar el por qué.

Bomberos maneja muchas hipótesis pero no cree que la explosión que se escuchó haya sido producto del fuego. “Puede ser producto de la cantidad de aire que hay allí adentro. Al ser un lugar impermeable y que provoca una masa de aire que se puede inflamar, eso parece una explosión. Igual que si se baja el techo y comprime el aire”, indicó Prato.

Lo cierto es que en el Cilindro se estaba a punto de terminar la primera etapa de una serie de obras proyectadas. “Aspiramos a que finalice en febrero de 2010”, dijo a 180 en octubre de 2009 el secretario de Deportes de la Intendencia de Montevideo, Gonzalo Halty. La aspiración no se pudo concretar y las mejoras en los caños de desagües se demoraron más de lo previsto. A días del fin de obra se produjo el derrumbe.

En esa misma nota, Halty explicó que en 2003 se hizo estudio en el que se evaluaron aspectos de la construcción del lugar y se llegó a la conclusión de que había que realizar diferentes arreglos, además de mantenimiento. Dijo que si bien el techo era "una obra maestra" también suponía "un problema" porque tenía 7.000 metros cuadrados de superficie que desagotaban en sólo cuatro bocas de desagüe. "Además, el techo flexible, se mueve cuando hay viento o tormenta, y el encastre de los caños de desagüe también se mueve”, añadió.

Actualmente se estaba haciendo un mantenimiento de los canales de evacuación de aguas pluviales. Prato explicó que el techo “nunca fue reparado porque no fue necesario” pero sí que se cambiaron en varias oportunidades los cuatro canalones por los que desagotaba.

Construido por Leonel Viera en 1956 para albergar la Primera Exposición Nacional de la Producción, la idea inicial era demolerlo poco tiempo después. Por eso incluso, se levantó con una estructura liviana para su porte. Once años después, la construcción fue reciclada como escenario deportivo. Allí se realizó el mundial de básquet del 67 y comenzó a utilizarse para los partidos más importantes a nivel de clubes y de selección.

Después del mediodía, se decidió sacar la cinta y poner un vallado por miedo a que la gente quisiera entrar para llevarse algún recuerdo o para curiosear. Es que todavía caen algunas piedras desde lo alto. Ya no hay autoridades de la Intendencia, quedan pocos periodistas y los alrededores retoman la calma.

Todos saben que no habrá más Cilindro Municipal. Que no lo recuperarán. Que pasará a la historia, después de 54 años de historia.