atado con cadena

Es una cuenta que está pendiente y que promete la reedición de la disputa interna en el Pit-Cnt entre radicales y moderados: el "fantasma" de un paro general de 24 horas volverá a cobrar vida cuando se reúna la Mesa Representativa el 3 de setiembre. Tal vez antes, si algún sindicato los presenta en el Secretariado Ejecutivo. En este sentido la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (Cofe), los docentes y el Correo volverán a la carga con el tema. En una semana signada por el paro de Cofe y los gremios de la enseñanza el jueves, que paralizara a toda la Administración Central y cerrara la puerta de los institutos de enseñanza, tanto la Federación Nacional de Profesores (Fenapes) como el sindicato del Correo, estiman que llegó el momento de plantear la medida. Para José Olivera, dirigente de Fenapes, en el sindicato están "a la espera de que el secretariado convoque para discutir (al paro). Entendemos que no hay elementos para que se diga que no hay que rever esa medida", dijo a Ultimas Noticias.

La disconformidad se extiende también a algunos sindicatos que componen la Mesa Sindical Coordinadora de Entes (Msce). El representante del gremio de Trabajadores Postales, José Matto, indicó a Ultimas Noticias que la postura es volver a "reflotar el paro", a pesar de la posición que mantienen la mayoría de los dirigentes de la Mesa de no acompañar esta medida. Incluso, el jueves los sindicatos de los entes no pararán junto a Cofe y los docentes. "Cada vez se complica más. No hay avances y hay que hacerlo. Lo que pasa que en el movimiento sindical hay dos tendencias: un sector que quiere pelear y otro que está con el freno de mano permanente. La mayoría están con el freno de mano puesto", aseguró Matto.

A estos gremios se agrega la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (Cofe), la que según su secretario general Joselo López, entiende que el paro "sigue vigente, al menos que la negociación cobre un giro de 180 grados", según dijo a Ultimas Noticias.

Saben que ese planteo volverá a abrir las divisiones que la central intento cerrar el pasado jueves durante el paro parcial, cuando en el discurso se epeló de manera insistente a la unidad del movimiento sindical. Pero entienden que no hay otro camino a la vista.

CUESTIONAMIENTOS

El tema generó duros enfrentamientos, cuando la propuesta que nació desde varios sindicatos de la actividad pública, se colocó arriba de la mesa en las sesiones del Secretariado Ejecutivo. En ese momento, desde la corriente Articulación, la más moderada, se la consideró como "una medida política fuerte", "aventurada" e impulsada por "locas pasiones". Ese pensamiento luego también cobró fuerza entre los dirigentes de la actividad privada que integran el Ejecutivo.

La iniciativa perdió fuerza al momento de ser discutida en la Mesa Representativa del 27 de julio y quedó pendiente para la primera semana de setiembre.

"Si hay necesidad de votar un paro general, será a la luz de lo que haya emergido de las negociaciones colectivas de los privados y del sector público. En muchos aspectos nos pondremos de acuerdo con el gobierno y en otro no, pero estamos en una etapa de negociación", dijo ese día uno de los coordinadores de la central, Fernando Pereira (Articulación).

Pero la postura es distinta en sectores radicales que son partidarios de ejecutar la medida cuantas veces sea necesario. A casi un mes desde que fuera rechazada la iniciativa, tanto en los Consejos de Salarios de públicos, como de privados (ver recuadro), el panorama no cambió demasiado y en la balanza de reivindicaciones, el peso de las diferencias sigue siendo mayor al de los acuerdos.

“NEGOCIACIÓN EMPANTANADA”

La lentitud en la marcha de la negociación colectiva del sector privado es una situación reconocida, tanto por los sindicatos, como por dirigentes del Pit-Cnt, y que quedó clara la semana pasada durante la sesión del Consejo Superior Tripartito.

Ese día, trabajadores y empresarios reclamaron al gobierno "acelerar" los procesos que califican como "empantanados". La mayoría de los subgrupos cuyos acuerdos vencieron el 31 de junio están instalados, pero hasta ahora la discusión se limita a considerar lineamientos generales. El nerviosismo va en aumento, porque el grueso de los convenios (120) vence el 31 de diciembre y se pretende comenzar a adelantar su renovación en setiembre y octubre, según hicieron saber integrantes del Secretariado Ejecutivo.

Por otra parte, una de las situaciones más complejas se da en la negociación de los convenios en la Salud. La disconformidad que existe en la Federación Uruguaya de la Salud (FUS) con los lineamientos que propone ejecutar el sector empresarial motivó que ayer el Consejo Central del gremio resolviera presentar una propuesta de paro por 24 horas en toda la salud privada para el 10 de setiembre, en vista de que la Reforma de la Salud no avanza y los Consejos de Salarios tampoco.

El secretario general de la FUS, Jorge Bermúdez, indicó a Ultimas Noticias que no hay ninguna posibilidad de que la propuesta del gobierno sea aceptada por el sindicato. "Los empresarios no ponen un solo peso para el aumento salarial, solo quieren lograr la suba de la cuota mutual", precisó.

INSATISFECHOS

La Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes) analizó ayer la propuesta del Poder Ejecutivo de otorgar un 22,2% de aumento salarial en todo el quinquenio, punto que catalogaron de "insuficiente". El planteo causó molestia entre el cuerpo docente, ya que "desde el punto de vista cuantitativo es insuficiente porque ni siquiera contempla el crecimiento del Producto Bruto Interno, que según expertos del gobierno sería en los próximo cinco años de un 24,6%", sostuvo a Ultimas Noticias José Olivera, miembro de la Fenapes.Mantendrán las medidas de paros zonales, que continuarán este jueves 26 en los liceos de Montevideo, Canelones (excepto Atlántida, Salinas, Parque del Plata, Floresta y San Luis) y Ciudad del Plata, con la ocupación de cinco liceos. El viernes pararán los docentes de Salto, Artigas y Paysandú y el lunes 30 en Cerro Largo, Treinta y Tres y Rivera.