sábado, 4 de diciembre de 2010
otras cabezas
El dirigente Heber Bousses manifestó a Ultimas Noticias que la elección debe ser realizada el próximo año, cuando se realice la sesión del congreso nacional, la cual debe definir el tema de las autoridades.
"No habría candidato de consenso y estamos proponiendo que los compañeros que se presenten estén avalados por una elección de la que participe la masa frenteamplista", sostuvo Bousses. "Si Tabaré Vázquez fuera el candidato, tendríamos solucionado el problema; es el candidato de consenso", indicó.
Bousses afirmó que la voluntad política del MPP es plantear la propuesta al plenario, comenzar la discusión y definir durante el primer semestre de 2011, ya que el congreso funcionará durante el segundo.
Según indicó el dirigente, la propuesta requiere de una reforma estatutaria por lo que precisa de mayorías especiales.
En un editorial de "Participando", mensuario del MPP, la aplicación del Presupuesto generará "acciones de gobierno sumamente importantes y concretas que comienzan en el año entrante, como resultado del mejor Presupuesto aprobado en la historia del país".
"A pesar de ello, estamos en una situación de dispersión de la fuerza política Frente Amplio", añade.
La dispersión fue señalada "en el surgimiento de grupos políticos en los que no hay diferencias ni matices con otros ya existentes, a no ser en objetivos puramente electorales". También en el surgimiento de "formas nuevas de acción política de los frenteamplistas que no están contenidas en la estructura organizativa del Frente".
"El Frente Amplio puede y debe revertir esta situación. Deberían ser sus máximas autoridades quienes transmitieran la confianza necesaria en todos los frenteamplistas para las transformaciones que se requieren, sin embargo esto no es lo que ocurre".
Para el MPP, la fuerza política debe dar "batalla contra la nueva derecha y la ultraizquierda y no el Gobierno Nacional".
"La ultraizquierda y la nueva derecha han avanzado en sectores donde era impensable su presencia. Hoy tenemos sindicatos importantes que tienen fuerte influencia y desde los cuales, apoyados por algunos medios de comunicación, generan una peligrosa situación". "Para la ultraizquierda el enemigo no es la derecha, es el Frente. Para la derecha el enemigo no es la ultraizquierda, es también el Frente. Esta alianza no escrita la vemos en los hechos", agrega.
"Con una conducción del Frente con gran apoyo podemos revertir esta situación. La nueva presidencia debería ser elegida por todos los frenteamplistas del país y en elecciones a padrón abierto", reclama.
La nueva autoridad no solamente debe reordenar las filas militantes en defensa del gobierno popular, debe también retomar el proceso de acumulación que condujo al Frente Amplio al gobierno nacional.
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