miércoles, 9 de febrero de 2011
quiere la union
La oposición arremetió con todo contra el debate electoral en el que entró el FA y desde ese ámbito creen que la reaparición de Tabaré Vázquez tiene como objetivo disimular las divisiones internas. Desde la izquierda, dicen que están "nerviosos".
Vázquez se llevó las miradas tanto de los frenteamplistas como de los dirigentes de los partidos de la oposición luego de dejar de lado su año sabático y enviar mensajes cada vez más claros en el sentido de que aceptará volver a ser candidato a la Presidencia.
Sus últimos movimientos fueron duramente criticados desde la oposición y de esta manera se produjo la primera gran polémica entre quienes podrán ser competidores por la banda presidencial dentro de cuatro años.
Los líderes opositores le quitaron trascendencia política al hecho de que Vázquez aparezca como su más probable rival en la próxima campaña electoral, pese a que en 2010 era la figura con la más alta popularidad de la izquierda con una aceptación del 69%, según un estudio de Equipos Mori.
Los líderes de la oposición afirman que la reaparición del ex presidente no cambia sus estrategias ya que aducen que no son tiempos electorales. Incluso, algunos interpretan la vuelta al protagonismo público de Vázquez como un intento de "rescatar" al Frente Amplio (FA) y ayudar a disimular las diferencias que han surgido en el seno de la fuerza política. Es el caso del presidente del Directorio del Partido Nacional, Luis Alberto Lacalle. "Si están recurriendo a un candidato que los junte y los una será porque verán que van mal", dijo a El País.
"No es tiempo electoral. Sorprende que desde filas del gobierno, que debe ser el menos interesado en ingresar en carrera de competencia electoral, surja esta autoproclamación. Parece que se da poco menos que ya pasado este período y se está pensando en un rescate del Frente Amplio por vía de Tabaré Vázquez", agregó el senador nacionalista.
Mientras tanto, el secretario general del Partido Colorado, Pedro Bordaberry, dijo que las discusiones electorales dentro del Frente Amplio a menos de un año de comenzado el gobierno de José Mujica son una "irresponsabilidad" y que le causan "dolor".
"Están preocupados por mantener el asiento y no por solucionarle los problemas a los uruguayos. Es triste que en lugar de brindar soluciones se estén peleando y tengan que decir `traigamos a Vázquez` y empiezan a ver quién va a ser el candidato a vicepresidente", dijo el senador y líder de Vamos Uruguay.
Quien no se sorprendió "en absoluto" ante los últimos movimientos de Vázquez fue el líder del Partido Independiente, Pablo Mieres. "Era un dato implícito de que sólo lo que se ha hecho es avanzar un poco más", dijo Mieres.
Ante las voces que surgieron desde la coalición de izquierda que consideran que Vázquez es una certeza de triunfo electoral, Mieres advirtió que "hay mucha agua por correr debajo del puente" y que "nadie puede hablar de favoritismo". Incluso apuntó que aspectos de la gestión de Mujica pueden influir en la carrera electoral hacia 2014, tanto sea positiva como negativamente.
Interna. Las reacciones de los líderes opositores responde al "temor" ante una nueva derrota electoral que vislumbran, según dicen desde el Frente Amplio.
"Ladran Sancho, señal que cabalgamos y con caballo ganador. Qué nerviosos que están", dijo a El País el diputado Carlos Gamou (CAP-L). El legislador cree que si las elecciones son el domingo que viene y Vázquez encabeza la fórmula, el Frente Amplio gana con 60%.
Detrás de los dichos de Vázquez, el tema electoral fue abordado por figuras del gobierno como el ministro del Interior, Eduardo Bonomi.
"Nunca se discute tan temprano el tema (pero) en este caso me parece adecuado y conveniente que (Vázquez) haya abierto la puerta a la posibilidad de ser candidato del Frente porque evidentemente soluciona un problema", dijo el secretario de Estado y uno de los principales operadores políticos de Mujica.
Todo dicho. Vázquez dio señales favorables a aceptar ser candidato y dijo que "conversaría" si el Frente Amplio se lo pide. Ayer volvió a tener exposición pública aunque esta vez para dejar el tema en suspenso.
"Por un gran tiempo no voy a volver a hablar de temas electorales. Ya está todo dicho", dijo el ex mandatario en el programa Mirando de Cerca de Metrópolis FM. Acerca de los pedidos de la senadora Lucía Topolansky para que comunicara sus planes, Vázquez dijo que "está preocupada porque no es fácil encontrar de la noche a la mañana a un candidato".
Ayer, la senadora Topolansky dijo estar "contenta" porque se va "despejando el panorama y eso le sirve al Frente".
El pedido de Lucía Topolansky
La senadora Lucía Toplanksy (MPP) fue la primera en pedirle públicamente al ex presidente Tabaré Vázquez que definiera sus planes de ser el candidato de la fuerza política en 2014.
Argumentó que de saberlo se quedaba "tranquila" ya que lo consideraba como el candidato natural de la coalición de izquierda.
Topolanksy argumentó que se necesitaba "tiempo" para construir una nueva candidatura de cara a 2014 si Vázquez no se postulaba.
Luego de conocer las nuevas declaraciones en las que Vázquez dijo que la candidatura dependería de las decisiones del Frente Amplio, la senadora del principal sector del Frente Amplio dijo sentirse "contenta" ya que eso "despeja" y "soluciona" un problema.
La oposición
Luis Alberto Lacalle
Senador nacionalista
"Si están recurriendo a un candidato que los junte y los una será porque verán que van mal. No es tiempo electoral y sorprende que desde filas del gobierno surja esta autoproclamación. Parece que se da poco menos que ya pasado este período y se está pensando en un rescate del Frente".
Pedro Bordaberry
Senador colorado
"Lo que les importa a quienes nos están gobernando es quién va a ser el candidato en 2014. Están preocupados por mantener el asiento y no por solucionar los problemas a los uruguayos. Causa dolor. Los problemas del país, ¿se les da respuesta peleando por quién va a ser el candidato?"
Pablo Mieres
Líder del Partido Independiente
"Era un dato implícito y lo que se ha hecho es sólo avanzar un poco más. Todos los movimientos desde que Vázquez dejó la presidencia eran los de un precandidato. No es una buena señal que el partido de gobierno se dedique a un debate de candidaturas cuando tiene cuatro años por delante".
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